Fin de año, San Silvestre Barcelonesa

Terminar el año con una buena carrera siempre resulta muy motivador y estimulante. Este año también busqué una San Silvestre para lograr ese objetivo y en esta ocasión le tocó a la Barcelonesa (10 kilómetros) celebrada en el municipio de Sant Cugat del Vallès. Me voy a quedar con lo bueno de la experiencia y en resumen es haber compartido con otros tres mil corredores un tiempo corriendo sin estorbos.

En mi progresión lo positivo es haber sido capaz de afrontar un circuito con un asfalto bastante duro con un frío que no ayudaba nada. Lo bueno es que estas circunstancias no me supusieron ningún tipo de esfuerzo especial por lo que me siento feliz por la estupenda adaptación de mis pies a circunstancias que en otro momento me hubiesen resultado insuperables o muy duras.

La cuestión menos interesante es haber pagado la carrera más cara de mi vida (1,8 euros por km) para muy poco. Como muestra solo decir que no nos dieron ni imperdibles para el dorsal.

Por otro lado me disgustó y en eso poco tiene que ver la organización ¿o si? que la inmensa mayoría de los corredores al menos por el grueso del pelotón atajaban de forma sistemática y escandalosa cientos de metros en múltiples zonas del recorrido. Luego supongo que mirarán orgullosos sus registros de tiempo en la clasificación.... en fin. Esto es algo que cada vez veo en más carreras y la verdad me hace sentir vergüenza ajena.

Tampoco me gustó gran cosa que partes importantes del circuito discurriesen por calles mal o nada iluminadas. Hacer una carrera nocturna no ha de suponer que sea en tan penosas condiciones. 

En fin, este año seguro que tendremos más y mejores carreras.